Suelen ser de Sol... A veces los extraño a ustedes, mis queridos poetas.
Pequeñas flores del basto prado donde solíamos mirar de tarde a noche y hasta el alba vestidos de risa. No se preguntan que nos pasa hoy, medio marchitos, doloridos de penurias pero jamás perdiendo la finura y delicadeza de botón a punto de florecer... Los espero cada mañana luego tarde hasta el alba otra vez, hasta que duela el alma de tantos esperarlos pero siempre me los encuentro, cerca del sol te encuentro dulce flor...
A veces tan solo nace decirlo...
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